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Una reflexión sobre los avances, conversaciones y retos que han marcado estos seis meses en el camino hacia una industria más conectada, eficiente y preparada para lo que viene. 

Medio año en marcha

Llegamos al ecuador del año y, como suele ocurrir en estas fechas, se abre un pequeño paréntesis. El ritmo baja ligeramente, se revisan los objetivos marcados en enero, y empiezan a asomar las decisiones estratégicas que marcarán el último tramo del año. En este contexto, el verano se convierte en una oportunidad para hacer balance con calma y perspectiva. 

Desde Clavei, llevamos seis meses intensos acompañando a empresas del sector industrial del calzado en sus procesos de digitalización y mejora operativa. Y si hay algo que hemos percibido con claridad en este primer semestre de 2025, es esto: la transformación está ocurriendo, aunque muchas veces sea en silencio. 

No hablamos de grandes titulares ni de proyectos disruptivos que salen en prensa. Hablamos de decisiones inteligentes, de equipos que priorizan el control sobre el caos, de responsables que entienden que la eficiencia no es una moda, sino una condición necesaria para seguir siendo competitivos. 

Y en el centro de todo está el dato. Porque si hay un hilo común que atraviesa todas las conversaciones que hemos tenido en estos meses, es la necesidad de contar con información en tiempo real, fiable, conectada. Ya no se trata solo de “tener un ERP”. Se trata de tener visibilidad, de anticiparse, de eliminar tareas repetitivas, de saber en todo momento qué está pasando en el negocio. 

💡A lo largo de este artículo queremos compartir algunas de las señales, aprendizajes y cambios reales que hemos vivido durante este semestre. No como una lista de logros, sino como una invitación a la reflexión: ¿Qué están haciendo las empresas que marcan el paso? ¿Cómo podemos preparar mejor el segundo semestre? ¿Dónde estamos invirtiendo realmente el tiempo y el esfuerzo? 

Porque el cambio no siempre es visible desde fuera. Pero se nota dentro. Y eso, al final, es lo que cuenta. 

Las conversaciones han cambiado

Si algo ha quedado claro en este primer semestre, es que las conversaciones con las empresas ya no giran solo en torno a “tener un ERP”. El discurso ha madurado. Hoy, cada vez más responsables de empresas del calzado ya sean gerentes, financieros, responsables de operaciones o de IT llegan con una idea mucho más clara: no quieren digitalizar por inercia, sino porque tienen un problema concreto que resolver. 

👉Y eso, sin duda, es una señal positiva. 

Los temas que antes eran “accesorios”, como el control de inventario en tiempo real, la automatización de procesos administrativos o la integración entre departamentos, ahora se han convertido en el centro de la conversación. Lo que antes se veía como “mejoras futuras”, hoy se percibe como “imprescindibles”. 

En estos seis meses hemos notado un cambio de enfoque en muchos de nuestros proyectos: 

✅ Empresas que quieren saber dónde está el stock exacto en cada momento, por referencia, talla y color. 

✅ Departamentos financieros que piden automatizar cierres contables y reducir la dependencia de tareas manuales. 

✅ Responsables de producción que buscan planificar de forma más precisa en función de la disponibilidad real de materiales. 

✅ Y, sobre todo, equipos que quieren dejar de ir “a rebufo” de los problemas y empezar a tomar decisiones con información actualizada, no con intuiciones. 

Este cambio no ocurre por casualidad. Responde a una necesidad real de eficiencia, pero también al aprendizaje que muchas empresas han ido acumulando a base de enfrentarse a problemas operativos una y otra vez. Ya no se trata solo de vender o producir más, sino de hacerlo mejor. 

👉La buena noticia es que hay tecnología disponible para acompañar ese cambio. Y que cuando la conversación empieza con una necesidad clara, el proyecto avanza con mucha más solidez. 

El dato en tiempo real como ventaja competitiva

Una de las ideas más repetidas en nuestras conversaciones este semestre ha sido clara: si no puedes ver lo que está pasando en tu empresa en tiempo real, estás gestionando con los ojos vendados. 

Y en el sector del calzado, esa visibilidad ya no es opcional. La estacionalidad, la gestión de referencias complejas (por tallas, colores, combinaciones), los costes logísticos y las exigencias de los clientes hacen que la capacidad de reacción sea un factor clave de rentabilidad. 

Cuando hablamos de “dato en tiempo real”, no nos referimos a un dashboard bonito o a un informe que se actualiza cada semana. Hablamos de que la empresa pueda responder, sin margen de duda, a preguntas como: 

👉¿Qué stock real tengo ahora mismo en cada almacén? 

👉¿Cuántos pares de cada modelo tengo comprometidos? 

👉¿Cuál es el margen real por referencia o por cliente? 

👉¿Qué pedidos están en riesgo por falta de materiales? 

👉¿Cómo afecta cada movimiento logístico a mis costes finales? 

Las empresas que han empezado a responder estas preguntas en tiempo real han cambiado su forma de trabajar. Ya no corren detrás de los problemas, sino que se anticipan. Detectan desviaciones antes de que se conviertan en errores. Ajustan su producción o sus compras con datos, no con suposiciones. Y lo más importante: toman decisiones más rápidas, más seguras y con menor desgaste operativo. 

Este semestre hemos visto cómo algunos de nuestros clientes han logrado pequeños grandes avances gracias a esa visibilidad. No se trata de reinventar su negocio, sino de mejorar lo que ya hacen bien. Por ejemplo: 

✅ Planificando mejor las compras y evitando sobrecostes innecesarios. 

✅ Mejorando la trazabilidad de materiales para responder con agilidad a inspecciones o reclamaciones. 

✅O incluso simplemente sabiendo, sin tener que preguntar, qué está pasando en cada parte de la empresa. 

Y esa es, quizás, la mayor ventaja competitiva de todas: la tranquilidad de tener el control. 

Verifactu: una excusa perfecta para mejorar

Verifactu ha sido uno de los temas recurrentes en este primer semestre. Aunque su obligatoriedad aún está en proceso de calendario (implantación voluntaria desde julio de 2025 y exigencia general en 2026), muchas empresas del sector ya han empezado a preguntar y con razón:
“¿Estamos preparados para esto?” 

Lo interesante no es solo el cambio técnico que implica emitir facturas electrónicas en formato validado por la AEAT y enviarlas en tiempo real, sino el efecto dominó que provoca en toda la operativa interna. 

Software Producción Verifactu

Verifactu no te permite trabajar con datos desactualizados. No admite errores manuales sistemáticos. No tolera la falta de trazabilidad documental. Y tampoco se lleva bien con procesos que dependen de “esa persona que siempre sabe cómo hacerlo”.

Por eso, más allá de la obligatoriedad, muchas empresas están empezando a ver Verifactu como una excusa perfecta para revisar, ordenar y mejorar sus procesos. No solo por cumplir la ley, sino por tomar el control de una vez por todas. 

Durante estos meses, en Clavei hemos acompañado a empresas que han aprovechado este contexto para: 

👉Unificar sistemas y eliminar herramientas desconectadas. 

👉Revisar su flujo de ventas y facturación, desde el pedido hasta el cobro. 

👉Reducir tareas manuales en el departamento financiero. 

👉Y, sobre todo, tener la seguridad de que sus datos son correctos, consistentes y auditables. 

Porque al final, Verifactu no es solo una norma de facturación. Es una llamada de atención sobre cómo gestionamos la información clave del negocio. Y cuando se aborda con visión estratégica, puede convertirse en el empujón que muchas empresas necesitaban para dar el paso hacia una gestión más moderna, más conectada y eficiente. 

Reconocer lo invisible: la transformación silenciosa

No todas las transformaciones vienen acompañadas de grandes anuncios, comunicados de prensa o inauguraciones. De hecho, las más relevantes, las que realmente cambian la forma de trabajar de una empresa, suelen ser silenciosas. 

A lo largo de este semestre, hemos sido testigos de muchos de esos cambios discretos pero decisivos. Empresas del calzado que han pasado de controlar su inventario “más o menos” a tener visibilidad exacta de cada referencia. Departamentos que han dejado de cuadrar cifras “a última hora” y ahora cierran el mes sin sorpresas. Equipos que ya no dependen de llamadas o correos para saber qué materiales hay en almacén o qué pedidos están en marcha. 

No son historias espectaculares. No salen en LinkedIn. Pero son el reflejo de una transformación real. Y merecen ser reconocidas. 

Porque transformar un negocio no siempre es lanzar un nuevo canal online o robotizar una línea de producción. A veces, el mayor avance está en cosas tan simples y tan potentes como: 

✅ Poder consultar un dato sin tener que pedirlo. 

✅ Confiar en que la información es correcta. 

✅ Detectar un error antes de que impacte al cliente. 

✅ Reducir las tareas repetitivas que no aportan valor. 

Esa es la transformación silenciosa que estamos viendo en muchas empresas del sector. Una transformación que no depende de presupuestos millonarios, sino de decisiones valientes, de visión a medio plazo y de la voluntad de mejorar lo que ya se hace bien. 

Y lo más interesante es que quienes están dando estos pasos, ya están notando los beneficios: menos errores, más agilidad, mayor tranquilidad y una sensación de control que, en un sector tan exigente como el calzado, marca la diferencia entre ir sobreviviendo y poder crecer con confianza. 

Mirando al segundo semestre: ¿Qué toca ahora?

Con medio año recorrido y otro por delante, el verano nos da una ventana perfecta para hacer balance. Sin el ruido del día a día, muchas empresas aprovechan estas semanas para parar, observar y sobre todo preguntarse si están donde querían estar. 

En el sector del calzado, donde los ciclos son marcados, la operativa no da tregua y la planificación es clave, el segundo semestre suele venir cargado de decisiones importantes: nuevas colecciones, fabricación anticipada, negociaciones con proveedores, preparación de campañas clave… Todo eso exige tener los procesos afinados y la información clara. 

💡Y aquí surge una pregunta clave: ¿Tenemos una base tecnológica y organizativa que nos permita afrontar el resto del año con seguridad? 

Porque lo que viene no es sencillo. Verifactu entrará en escena de forma progresiva, los costes seguirán siendo una preocupación, y la exigencia de los clientes en rapidez, personalización y trazabilidad no va a disminuir. 

Por eso, el verano no debería ser solo un descanso. También puede ser el momento ideal para: 

👉Revisar procesos que siguen dependiendo de personas clave o herramientas manuales. 

👉Detectar ineficiencias ocultas que se arrastran campaña tras campaña. 

👉Planificar con tiempo un proyecto de mejora tecnológica, sin prisas ni improvisaciones. 

👉Tomar decisiones con datos reales sobre la mesa, no con sensaciones o urgencias. 

El objetivo no es cambiarlo todo de golpe, ni embarcarse en grandes proyectos. A veces, lo más estratégico es empezar por donde más duele, o por donde más retorno inmediato puede ofrecer: una integración que falta, una automatización sencilla, una revisión de informes clave… 

Lo importante es empezar con intención. Porque si algo hemos visto en este primer semestre, es que las empresas que van un paso por delante no son las más grandes ni las más tecnológicas: son las que actúan a tiempo. 

Lo importante no siempre hace ruido

Este primer semestre de 2025 nos deja una certeza: el cambio está en marcha. No siempre es visible. No siempre es inmediato. Pero está ocurriendo, y quienes lo están liderando no son los que más hablan, sino los que más escuchan, observan y actúan con sentido. 

El dato en tiempo real, la automatización, la integración de procesos, el cumplimiento normativo… Son piezas que ya no se pueden tratar por separado. Forman parte de una misma conversación: cómo trabajar mejor, con más control, menos fricción y más rentabilidad. 

Y eso empieza por reconocer que no todo está bien, que hay margen de mejora, y que esperar a septiembre o a que la norma lo exija puede salir más caro que anticiparse con criterio. 

Desde Clavei, en estos seis meses hemos tenido el privilegio de acompañar a empresas que están dando ese paso. Algunas con proyectos ambiciosos. Otras con cambios más modestos, pero igual de valientes. Y todas con algo en común: el compromiso de mejorar desde dentro, paso a paso y con foco en lo importante. 

Ahora, el verano nos da un respiro. Un paréntesis para mirar con perspectiva y decidir hacia dónde vamos en el segundo tramo del año.

Y quizás este sea el mejor momento para hacerte una pregunta sencilla: ¿Estoy tomando decisiones con el control que me gustaría tener?

Si la respuesta no es un “sí” rotundo, aquí estamos. No para venderte nada, sino para ayudarte a pensar, planificar y construir el cambio cuando estés listo.

Porque el verdadero avance no siempre hace ruido. Pero se nota. Y transforma.

ClaveiPro está pensado para darte ese control: claridad, datos y visión para tomar mejores decisiones. Cuando lo necesites, hablamos.

Nueva llamada a la acción


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