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Es un hecho: el futuro, o al menos lo que considerábamos el futuro, ya está aquí. En la época de los transbordadores espaciales y los satélites hemos comenzado a acuñar nuevos términos que poco han tardado en hacerse cotidianos en nuestro vocabulario. Es que algo ha cambiado aunque no seamos conscientes de ello.

La cuarta revolución industrial

Denominada ya como la Industria 4.0, estamos hablando de una era en la que la digitalización estará total y absolutamente integrada en todas las fases del proceso, desde la obtención de la materia prima hasta el servicio posventa, no sin pasar antes por la manufactura y logística propiamente dichas.
Siendo pues conscientes de la fuerte competencia que esto va a suponer, así como de la revolución tanto a nivel humano como energético, la Industria 4.0 nos permitirá:

  1. Procesos flexibles en una adaptación constante a la demanda.
  2. Trato al cliente totalmente individualizado.
  3. Ciclos más cortos y rentables de diseño, fabricación y venta.
  4. Series de producción cortas, rápidas y eficaces.
  5. Recogida e integración de información desde múltiples canales: desde herramientas de gestión convencionales (ERP, CRM, SCM, web corporativa, Help Desk, redes sociales, etc.), hasta de los propios actores en las cadena de producción mediante la revolución del IoT.
  6. Explotación y análisis de Big Data para optimización de procesos en tiempo real.

Gestión y análisis de datos

Es lo que hoy conocemos como Big Data y está intrínsecamente vinculado a la industria 4.0. El Big Data no es más que la gestión y desglose de ingentes cantidades de datos de tal magnitud que son imposibles de procesar mediante herramientas convencionales.
Datos de telefonía, redes sociales, logs, mails, encuestas, archivos de audio… Datos y datos producidos constantemente por el internet de las cosas -hoy ya todo es 2.0, 3.0 o 4.0-. Con cada pulsación en el teclado, cada consulta a un buscador digital o cada transacción con la VISA y hasta cada vez que pasamos la tarjeta de puntos en la gasolinera, queda un rastro de valiosa información sobre nuestras preferencias, gustos actuales y futuras tendencias que podríamos predecir a través de patrones de predicción.
La información es un arma poderosa para la industria 4.0 y el Big Data es la clave. Debemos estar preparados, y por ello es clave no solo contar con potentes herramientas de tratamiento y análisis optimizado de semejante volumen de información, sino con un equipo de profesionales que sea capaz de aportar valor en la integración y proyección de los datos que permitirán dar un salto cualitativo a tu marca.

Computación en la nube

El Cloud Computing nos ofrece la posibilidad de disponer de un servicio a través de Internet totalmente adaptado a nuestras necesidades. La migración al cloud permite tener nuestra información y archivos debidamente respaldados y protegidos en la nube, de modo que no tendremos que centrarnos tanto en la adquisición de la infraestructura para nuestros sistemas permitiéndonos un crecimiento totalmente escalable. Además la llegada del cloud nos da otras interesantes ventajas como:

  1. Coste adaptado a nuestra demanda y consumo.
  2. Seguridad y disponibilidad, siempre y cuando se implemente adecuadamente y se opte por proveedores de confianza.
  3. Rápida implementación y puesta en marcha.
  4. Acceso a toda la información en tiempo real cuando queramos y desde donde queramos con cualquier dispositivo con conexión a internet.

Ciberseguridad

La ciberseguridad está enfocada a proteger la información digital en los sistemas interconectados y se enmarca dentro de la seguridad de la información, aunque principalmente busca salvaguardar el soporte físico, el software, las redes y las infraestructuras.

En la Industria 4.0, en la que nuestros sistemas van a estar totalmente expuestos al mundo. Deberemos contar obligatoriamente con asesores especializados en ciberseguridad que permitan prevenir actos delictivos, del mismo modo siempre se ha hecho en el mundo offline con alarmas, cámaras, rejas, etc.

Debemos ser conscientes que con Internet desaparecen las barreras físicas y que cualquiera está expuesto y puede ser objeto de la ciberdelincuencia.

Robótica

Ni que decir tiene que uno de los pilares básicos en la Industria 4.0 es la robótica, haciendo fundamental la comunicación entre sistemas, máquinas y herramientas. La automatización es una premisa y especialmente a nivel de fábrica y control de medios de producción. Se hace imprescindible automatizar diferentes tareas en diferentes entornos con la integración de sistemas sencillos y fáciles de usar.
La robótica es parte intrínseca de estas soluciones y los robots, si bien no se harán con el control total de las fábricas, sí que acapararán un número significativo de tareas y procesos de fabricación que evidentemente se verán maximizados y que llegarán a todos los sectores en mayor o menor medida.

IoT, Internet de las cosas

Cuando hablamos de IoT, en realidad estamos hablando de la digitalización del mundo físico: desde frigoríficos capaces de leer las fechas de caducidad hasta zapatillas de running que almacenan directamente los datos de la carrera en la nube. Sin duda, el mundo cambia y el Internet de las cosas será clave en el proceso de digitalización de las factorías, para convertirlas en factorías inteligentes.
Desde la recogida de información, hasta la paremetrización y reconfiguración en tiempo real de las fabricas; el IoT permitirá generar por si solo ingentes volúmenes de datos, que deberemos estar preparados para gestionar

Realidad aumentada

La realidad aumentada permite, mediante un proceso informático, combinar el mundo real con el virtual. De este modo, conseguiremos aumentar la capacidad de preparar todo tipo de experiencias interactivas muy útiles para la venta de nuestro producto, como podrían ser los catálogos en 3D o los vestuarios de ropa virtuales.
Esta reciente tecnología, ya muy aplicada en algunos entornos como videojuegos, tendrá nuevas aplicaciones en la Industria 4.0 y todo tipo de herramientas de venta para smartphones.

Integración de procesos

Todo este nuevo paradigma no tendría ningún sentido si los sistemas no se implementan con una única visión, trabajando cada uno de forma independiente pero encauzados a un mismo objetivo e integrados de manera coherente.
Desde CLAVEi ya nos dirigimos en este sentido, gestionando este tipo de plataformas e implementándolas en las empresas que quieren saltar a esta Industria 4.0, a esta cuarta revolución industrial, ¿saltas?


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