En estos momentos de crisis, y con la competencia feroz de empresas de Asia, es cada vez más necesario tener una optimización de todos los procesos de fabricación, para ahorrar en costes, sin necesidad de bajar la calidad del producto. En este momento voy a centrarme en la optimización del almacén, dando unas pinceladas sobre las diferentes formas de llevarlo y porqué es necesario tener un almacén optimizado.
Hace no mucho, recuerdo como a todas las fábricas que iba, al final de temporada, le había sobrado una cantidad ingente de pieles, adornos, suelas, etc… y les daba igual, eran vacas gordas y lo mismo daba ganar 1000 que 1005, ahora mismo, si vas a una fábrica y te encuentras que han sobrado 20 pies de piel, te cae una buena si eres el responsable de compras.
Solución: optimización del almacén y del inventario
¿Qué podemos hacer para que esto no nos pase? La forma más sencilla de que no nos pase esto, es comprar únicamente lo que se necesita, en función de nuestra cartera de pedidos. ¿Es una forma válida de llevar un almacén? Sí, dependiendo del volumen de trabajo que haya y las urgencias en las fechas, es una forma válida. Otra forma, que escuche en una ocasión, es el método de la última caja, es decir, llega principio de temporada pido 10 bolsas de hebillas y cuando abro la última bolsa de estas 10, cojo y pido otras diez o las que crea conveniente. ¿Es válida esta opción? Para mí, no, es posible que haya en una estantería 25 pies de piel y realmente tener cero disponibles porque esos 25 ya están destinados a una producción que comenzará en breve.
Para mí, la opción más óptima de llevar un almacén, es adelantarnos a lo que vamos a necesitar, basándonos en temporadas anteriores consiguiendo así un mejor precio en la compra y sobretodo, ganando tiempo de respuesta para poder comenzar la producción en el mismo momento que me entra el pedido ; conocer bien las fechas de servicio de nuestros proveedores y rotación del producto,
¿Cuál es nuestra mayor ventaja sobre una fábrica en China o la India? No podemos competir en precios, es muy difícil, pero podemos competir en fechas de servicio, es decir, podemos servir la mercancía antes que nuestros competidores, cuando haces pedidos en empresas deslocalizadas ¿qué ocurre si necesitas reposiciones? ¿Os habéis dado cuenta de que este tipo de pedido cada vez tiene un mayor peso en la facturación final de una empresa? Vuestros clientes no quieren que les sobre ni un par al final de la temporada, por eso se quedan cortos en el primer pedido, y después viene la reposición, y ahí es donde nosotros no tenemos competencia, somos más rápidos, ¿de qué me sirve hacer un pedido en agosto de chanclas, si me las va a servir en octubre?
Pues para que podamos aprovecharnos de esto, tenemos que disponer de una gestión de almacén optimizada al máximo, para comenzar a fabricar cuanto antes sin que al final de temporada nos sobren demasiadas materias primas. PODEMOS SEGUIR MEJORANDO!!!!!!
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Como siempre, Jose Manuel, tienes razón. No solo hay que basarse en la experiencia de otras temporadas, sería un error, es importante basar algunas decisiones en esa experiencia pero hay otras cosas que no. Podríamos saber por ejemplo cuales son las fechas con mas carga de trabajo basandonos en temporadas anteriores, pero basar nuestras compras solo en ese dato sería un error, lo que pasa es que ya sabes que en estos blogs no puedes recrearte todo lo que te gustaría.
Como dice Héctor, La experiencia de la rotación y la demanda de nuestros artículos basada en la línea de tiempo es fundamental, pero hay que saber utilizarla, igual de peligroso es no saber nada de cómo se han comportado nuestros artículos anteriormente que basarlo todo en esa experiencia sin evaluar su posición en el mercado en la actualidad. Siempre hay que hacer una auditoria continua de nuestros productos para catalogarlos, conocer su posición en mercado, observar si se han quedado obsoletos, si son temporales, estacionales y basados en ello seguir el consejo de Héctor … PODEMOS SEGUIR MEJORANDO!!!!!!