Recuerdo con mucho cariño, cuando hace años los informáticos éramos unos «gurús» o nos trataban como grandes genios, era una época sin intrusismo donde la gente experta hablaba de la tecnología, de la gestión y de cómo optimizar nuestros recursos mediante la tecnología.
Ahora, todo el mundo tiene un amigo, un vecino o alguien que sabe formatear una máquina y que por ello se hace llamar informático o técnico en sistemas y cuando nosotros vamos a alguna empresa siempre sale en la conversación este individuo. A mi jamás se me ocurrirá a mi padre decirle como se pega un piso, porque lleva haciéndolo 40 años, sin embargo, a nosotros, cualquiera puede decirnos como montar una red, implantar un sistema de gestión, etc.
El socio tecnológico, clave para la transformación digital
¿Por qué si una empresa informática sugiere una solución, en ocasiones el cliente sale con la típica frase de que «mi vecino es informático y dice que eso no es así»? Veo genial que tengas un vecino informático, ¿pero que soy yo? La respuesta es clara, pero además soy algo más, soy TU SOCIO TECNOLÓGICO, yo busco lo mejor para ti, que tu empresa vaya bien redunda en mi empresa, es decir, tu mejora continua es mi mejora continua.
Siempre se ha dicho que los abogados tienen mala fama, de caros, etc. y al informático se le añade además, que tiene la culpa de todo. No tenéis que vernos como unos «sacacuartos», puesto que no lo somos, intentamos además ser proactivos, es decir, plantearte una mejora que ni tan si quiera tú, como empresario, sabías que existía, y descubrimos agujeros negros que ayudamos a solucionar.
Si no tienes informatizadas tus existencias y tus mermas, ¿cómo puedes detectar a golpe de clic que un 10 % de tus compras son erróneas o que has servido tarde un 15 % de tus pedidos o que estás vendiendo un producto sin conseguir la rentabilidad deseada? Pues para todo esto está tu socio tecnológico, para que estos temas tan vitales o cualquier otro, estén controlados a golpe de clic.
A ninguna empresa se le ocurre prescindir de los servicios de su asesor financiero, pero a todas cuando llegan las vacas flacas, recortan en la inversión tecnológica, cuando es tan importante como estar bien asesorado fiscalmente.
¿Por qué cuando se analiza las necesidades y se plasman en un proyecto, eso no tiene valor?
Tal vez, el propio sector de las TIC se haya encargado de crear esta fama, tal vez, nosotros mismos tengamos mucha culpa de ello, pero aprovecho esta ventana para que nuestro trabajo se valore y se le dé la importancia que tiene, ya que casi todos los procesos críticos de una empresa se realizan mediante un software de gestión.
Por lo tanto, seamos socios en vuestra andadura empresarial, que por nuestra parte buscaremos siempre tu beneficio, ya que somos la misma persona.
imagen: markoekstra
La verdad es que tenemos que encontrar un equilibrio, ni somos gurús ni somos los culpables de todo, a ver si lo conseguimos Tere 🙂
Estoy de acuerdo en todo lo que comentas en este blog.
Antes a los informáticos nos veían como dioses y me parecía excesivo este tratamiento.
Hoy en día se nos menosprecia bastante, y tampoco me parece correcto.
Espero que se nos valore un poco más gracias a este fantástico blog.
Si Joaquin, aqui seguimos, luchando siempre por la mejora continua.
Es cuestión de seguir en la línea de coherencia que nos permite a Clavei estar en el mejor momento después de más de 28 años, dando servicios informáticos, pensando más en nuestros clientes que en nosotros mismo (como bien dices, por puro egoísmo ya que si ellos van bien nosotros iremos bien) . Solo el 0.1 % de las empresas de informática cumplen los 15 años y nosotros ahí estamos; más de 60 personas como tú y como yo con ganas de reciclarnos todos los días por dar los mejores consejos a nuestros #CLIENTESysocios
Por desgracia Gustavo la cosa es asi, pero tambien es cosa nuestra cambiar esta tendencia y seguro que lo conseguiremos.
Leo grandes verdades en este articulo. Tienes mucha razón en todo lo que dices. Hoy en día se valora muy poco los consejos y la guía que un buen informático te puede aportar.